Kawhi Leonard anotó 28 puntos, Marcus Morris agregó 23 y los Clippers de Los Ángeles finalmente ganaron en casa y liquidaron el domingo por 126-111 a los Mavericks de Dallas en el juego 7 de la serie de primera ronda.
Jugando frente a una pequeña pero ruidosa mezcla de aficionados con mascarillas y recortes de cartón, los Clippers lograron lo que ningún de los dos equipos logró en los primeros seis duelos ganar en casa. Fue la primera vez en la historia de la NBA que el equipo visitante se llevó los primeros seis encuentros en una serie de postemporada.
Los cuartos sembrados Clippers avanzaron a las semifinales de la Conferencia Oeste por segundo año consecutivo. Enfrentarán a partir del martes en Salt Lake City al Jazz de Utah, líderes del Oeste.
Luka Doncic contó con 46 puntos, 14 asistencias y siete rebotes para liderar a los quintos sembrados Mavs, que no han podido ganar una serie de playoffs desde que se llevaron el título en el 2011. El esloveno terminó con 250 unidades, 55 rebotes y 72 asistencias en la serie.
Paul George agregó 22 tantos, 10 asistencias y seis rebotes para los Clippers. Los suplentes superaron a las reservas de Dallas 27-6, con grandes contribuciones de Terance Mann (13 puntos) y Luke Kennard (11 puntos).
Los Clippers produjeron una racha de 19-13, con cuatro jugadores que no fueran Leonard antes de que terminara el segundo periodo, se fueron al descanso con ventaja de 70-62.
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Trae Young se luce
Trae Young azotó temprano a Filadelfia para que los Hawks tomasen control del primer partido y sentenció la victoria con un globo a John Collins para la clavada de una mano.
Collins apretó el puño para festejar, y los Hawks respiraron con alivio tras estar cerca de dilapidar una amplia ventaja.
“Gracias a Dios que nos pusimos 20 arriba”, dijo el escolta de los Hawks Kevin Huerte.
Nuevamente a la altura del momento en la postemporada, Young anotó 25 de sus 35 puntos en la primera mitad y Atlanta se sobrepuso a Joel Embiid y la hostil afición para vencer el domingo por 128-124 a los 76ers en el primer partido de la serie.
“La confianza de todos está muy alta”, dijo Young. “Nos apoyamos mutuamente. Salimos a divertirnos. Todos estamos a tope”.
Embiid levantó un mazo en su regreso tras perderse un juego con un desgarre en el cartílago de la rodilla derecha. Recibió una gran ovación al ingresar a la cancha junto a Triple H, la estrella de WWE.
Pero Young y los Hawks abrumaron a los Sixers desde el inicio, distanciándose por 26 puntos.
Los 76ers intentaron darle la vuelta, pero fue muy tarde. Se acercaron a tres unidades con triples consecutivos de Embiid cuando faltaban 1:01 minutos. Bogdan Bogdanovic se llevó los dedos a la boca para callar a la afición y encestó un triple que selló el triunfo de Atlanta.
Aunque la atención se enfocó en Embiid, el estelar Ben Simmons y el resto del elenco con la mejor marca de la conferencia en la temporada regular, Young fue la figura individual del primer duelo.
Los Hawks tenían foja de 14-20 cuando despidieron al entrenador Lloyd Pierce el 1 de marzo. Pero desde entonces el equipo tiene marca de 33-12. Terminaron con el mejor récord del Este desde que Nate McMillan tomó las riendas y Young indicó que no está satisfecho sólo ganando una serie de postemporada.
Embiid cumplió con su parte al anotar 39 puntos. Tobias Harris aportó 20 puntos con 10 rebotes. Simmons firmó 17 puntos y volvió a sufrir desde la línea de tiros libres, embocando apenas 3 de 10.
Por momentos, Embiid hizo muecas de dolor y acabó tirado en el puso al pelear posición con Collins, cometiéndole una falta.
Bogdan Bogdanovic y Collins anotaron 21 puntos cada uno para los Hawks.
“Nos dieron una bofetada al iniciar el partido”, comentó el entrenador de los 76ers Doc Rivers.
“Fueron más físicos. Fueron el equipo más agresivo. Tuvieron más ímpetu temprano”.
El segundo partido será el martes en Filadelfia.
