Los organizadores de los Juegos Olímpicos de Tokio, aplazados al verano boreal de 2021 a causa del coronavirus, consideran la creación de un centro de control de enfermedades infecciosas durante el evento, previsto del 23 de julio al 8 de agosto.
Dicha estructura tendría la misión de coordinar los test así como el seguimiento de las personas infectadas por el COVID-19, su aislamiento y su tratamiento.
Este grupo ya evocó medidas como la prohibición de los apretones de manos y la limitación de desplazamientos de los deportistas. Pero no se espera ninguna decisión definitiva hasta 2021.
Ante el recrudecimiento del número de casos positivos en numerosos países, volvieron a aparecer las dudas sobre la posibilidad de organizar los Juegos.
Los organizadores declararon sin embargo que la existencia de una vacuna no será indispensable, y que no se considera un nuevo aplazamiento.