El comisionado de las Grandes Ligas, Rob Manfred, se sumó el viernes a las estancadas negociaciones laborales con los peloteros, a sólo tres días del plazo impuesto por los dueños para llegar a un acuerdo que evite el acortamiento de la campaña de 162 juegos.
Después de cuatro días consecutivos de sesiones de negociación, prácticamente infructuosas, que se enfocaron en intercambios de propuestas sobre minucias, Manfred emergió de las oficinas ubicadas detrás del plato en el Roger Dean Stadium y se dirigió al inmueble ubicado en el rincón del jardín derecho, que incluye el clubhouse de los Cardenales de San Luis.
El sindicato de peloteros ha empleado ese edificio para realizar sus asambleas.