La saga del asesinato del atleta olímpico tailandés Jakkrit “X” Panichpatikum concluyó con la condena a 25 años de prisión de su suegra Surang Duangjinda, que tenia79 años en ese entonces, y la pena de muerte a un hombre que participó en el crimen.
En un primer juicio la suegra había sido condenada a cadena perpetua, pero en una segunda instancia le redujeron la pena a 25 años después de tomar en consideración las acciones que había cometido el tirador Panichpatikum contra su esposa, Nitiwadee, la hija de Duangjinda.
Existen varios testigos de sus múltiples abusos físicos en frente de los hijos de la pareja e incluso dos meses antes de su muerte había disparado un arma supuestamente en dirección de su esposa y su hijo menor, aunque ninguno resultó herido.
Por esa acción fue detenido y luego se le concedió libertad bajo fianza. Ese hecho llevó a la suegra a tomar la decisión de contratar a un hombre para que lo matara después de los maltratos repetidos contra su hija por parte del tirador olímpico que compitió en las modalidades de Pistola de aire 10 metros, Pistola 50 metros y Pistola rápida de 25 metros en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Duangjinda confesó que ordenó el asesinato de Panichpatikum, quien fue asesinado de tres balazos el 19 de octubre de 2013, “porque mi yerno golpeó a mi hija una y otra vez y yo lo perdoné muchas veces, pero nada había mejorado”. Nunca antes había cometido ningún delito y su confesión fueron los motivos por los que le fue reducida su pena a 25 años.
El tirador recibió los tres disparos mientras conducía su Porsche en la ciudad de Bangkok en horas de la noche. Estaba estacionando su automóvil cuando fue baleado. De inmediato la criada llamó a la esposa del deportista, que es doctora, y ella intentó darle los primeros auxilios pero el atleta no respondió.
Es mismo año la policía arrestó al pistolero, y este les confesó que había sido contratado por un abogado que actuó bajo solicitud de la suegra de Panichpatikum.
“Lamento lo que hice, pero yo ya soy mayor y no sé cuánto tiempo podré cuidar de mi única hija”, dijo Surang en una conferencia de prensa.
La esposa del atleta olímpico fue investigada, pero luego fue descartada su participación en el crimen.
El pistolero y el conductor de la motocicleta recibieron una condena de cadena perpetua, mientras el abogado fue condenado a la pena de muerte.
