ÍMOLA, Italia (AP).— El Gran Premio de Italia que debió realizarse este fin de semana en la región de Emilia-Romaña, en el norte del país, se canceló este miércoles debido a las letales inundaciones en la zona.
La Fórmula Uno informó que tomó la decisión por motivos de seguridad y para evitar cargas adicionales para los servicios de emergencia, tras consultas con las autoridades políticas italianas.
Los pilotos, entre ellos Lewis Hamilton y Max Verstappen, respaldaron la medida. La escudería Ferrari también apoyó la decisión de cancelar la carrera en su feudo.
El presidente y CEO de la F1, Stefano Domenicali, dijo que era “una tragedia ver lo que ha ocurrido en Ímola y en Emilia-Romaña, la ciudad y la región donde crecí, y mis pensamientos y oraciones van para las víctimas de las inundaciones y las familias y las comunidades afectadas”.
En un comunicado, la F1 dijo que la decisión se tomó porque no era posible celebrar el evento de “forma segura” y también era “lo correcto y lo responsable dada la situación que enfrentan los pueblos y ciudades de la región”.
“No sería correcto poner más presión sobre las autoridades locales y los servicios de emergencia en estos momentos difíciles”, agregó.
Al menos cinco personas aparecieron por las inundaciones y otras 5.000 han sido evacuadas, mientras que el suministro eléctrico y las redes de telefonía celular se han visto gravemente afectadas. Se esperaba que millas de fanáticos acudieran al circuito el viernes para las sesiones de entrenamiento previas a la carrera, lo que agregaría más presión a un sistema de transporte ya de por sí saturado.