La incógnita sobre la sede de los Juegos Olímpicos de 2020, por la que pugnan Madrid, Tokio y Estambul, se develará el sábado en Buenos Aires en una votación de los miembros del COI precedida de un estricto hermetismo.
La 125 sesión del Comité Olímpico Internacional (COI) quedó oficialmente abierta por su presidente, el belga Jacques Rogge, durante una velada de gala la noche del viernes en el majestuoso teatro Colón de Buenos Aires.
“Para alguien que ama el deporte como yo, contribuir a hacer realidad los sueños de los atletas y poner el deporte al servicio de la sociedad es un privilegio indescriptible”, dijo el titular del COI, de 71 años, quien tras 12 años de gestión, entregará el mando a su sucesor que se elegirá el próximo martes entre seis candidatos.
Otra fuerte puja se dio este viernes para sumar un deporte en los juegos del 2020 entre el squash, lucha y sóftbol/béisbol, con presentaciones de las respectivas federaciones, antes de la definición el domingo.
En tanto, las delegaciones de las tres ciudades desplegaban este viernes sus últimos esfuerzos en pos de la sede del 2020 antes de la votación decisiva del COI.
Mientras se desarrollaba la ceremonia de apertura, cerca del Colón, manifestantes de izquierda quemaron banderas británicas además de una silueta de la Princesa Ana de Inglaterra, miembro del COI, en defensa del reclamo argentino sobre las Islas Malvinas, en disputa con el Reino Unido.
Otra grupo integrado por familiares y víctimas del franquismo rechazaron la candidatura de Madrid 2020.
Entre las tres ciudades postulantes, Madrid se presenta como la candidata de la austeridad con un presupuesto acotado de 3.100 millones de dólares y varias obras culminadas tras las sucesivas postulaciones para los juegos de 2012 y 2016, la cuarta tomando en cuenta la de 1972.
La crisis económica que golpea a España desde 2011 puede menguar las posibilidades de Madrid, de 3,3 millones de habitantes, ante posibles protestas sociales como ocurrió en Brasil durante la reciente Copa Confederaciones contra los millonarios gastos en competiciones deportivas.
“Si es por la situación económica de España -lo ha dicho la propia comisión de evaluación- la candidatura está asegurada, porque el 80% está construido”, dijo a la AFP el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco.
Blanco, también líder de la candidatura de la capital española, sostuvo que la situación económica es cíclica y países como “Francia, España, Italia y Alemania, suben y bajan”.
‘La Armada española’ desembarca en la capital argentina con fuertes figuras como el presidente del gobierno, Mariano Rajoy, y el príncipe Felipe de Borbón, que será el expositor central del proyecto, mientras el basquetbolista Pau Gasol, de los Lakers de Los Angeles de la NBA, lidera a los deportistas.
Otro símbolo catalán, el astro argentino Lionel Messi, del FC Barcelona, dio su apoyo a la capital española, cuya cuarta postulación a organizar los Juegos es respaldada por el 91% de los españoles, según una encuesta difundida en Buenos Aires.
Como sus competidoras, la delegación japonesa dispondrá el sábado de 45 minutos para convencer a los miembros del COI que la crisis en la central nuclear de Fukushima de 2011 ya no contamina el agua y por ello tampoco habrá problemas con los alimentos.
Con un presupuesto de 3.420 millones de dólares, sus fortalezas son la recuperación de algunas de las instalaciones de los juegos de 1964 y una organización de infraestructura “compacta”, así como su programa antidopaje que comienza en la enseñanza media.
Japón tiene “un importante programa antidopaje que empieza en cada estudiante de secundaria y extiende esta cultura a toda la sociedad, que garantizó que ningún atleta japonés jamás haya fallado una prueba de doping en los Juegos Olímpicos”, dijo el jueves Diachi Suzuki, oro en natación en Seúl-1988, en una rueda de prensa en Buenos Aires.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, estará en la capital argentina para defender la candidatura de Tokio al frente de una importante comitiva.
Estambul, con el presupuesto más acotado por 2.900 millones de dólares, se exhibe como “el puente entre dos continentes”, y cuenta a su favor con que por primera vez se harían en un país de mayoría musulmana.
Hasan Arat, jefe de la candidatura de Estambul, dijo que se esforzará hasta el final para que la ciudad turca sea sede de los Juegos Olímpicos en 2020.
“Soy un jugador de básquet, jugaré hasta los últimos tres segundos”, advirtió al respecto de como encara la puja la ciudad turca, cuya principal fortaleza es ser puente entre Europa y Asia.
Tokio lideraba el viernes, a 24 horas de la votación, las preferencias en las casas de apuestas británicas por delante de sus rivales.
En presentación es sucesivas, las federaciones de béisbol/sóftbol, lucha y squash expusieron ante la prensa las fortalezas de los respectivos deportes, uno de los cuales será incluido en la cita de 2020.
El presidente de la Federación Internacional de Béisbol, Ricardo Fraccari, propuso la realización de torneos cortos de cinco días para tentar a los profesionales y que ese deporte y el sóftbol vuelvan a la cita olímpica en 2020, tras quedar fuera para Rio de Janeiro-2016.
Los profesionales son renuentes a participar de los juegos alegando que se superponen con sus respectivas ligas.
La lucha quiere seducir a los miembros del COI con una propuesta para renovar la atención del público, dijo el titular de la federación de ese deporte, el serbio Nenad Lalovic.
En cambio, el squash se presenta como “un deporte nuevo, que ha cambiado en los últimos años y fácil de integrar porque son solo 64 atletas (32 hombres y 32 mujeres)”, dijo el presidente de la federación, Narayana Ramachandran.