La Federación Profesional de Voleibol y la Liga Mayor de Voleibol unirán fuerzas en una liga combinada que operará bajo el nombre de MLV a partir de 2026. Con una valoración de más de 325 millones de dólares (278 millones de euros), el acuerdo marca un punto de inflexión en el ecosistema del deporte femenino en el país.
Reportada inicialmente por el medio especializado Sportico a principios de semana, la información llega acompañada de una inversión sustancial y una detallada estrategia de expansión plurianual. La nueva liga, que se lanzará bajo el nombre de MLV, incluirá inicialmente a ocho equipos, todos ellos anteriormente pertenecientes a la PVF, entre ellos los Omaha Supernovas, vigentes campeones de la temporada inaugural de la federación. Los Supernovas ya habían anunciado su incorporación a la MLV antes de la confirmación oficial de la fusión. Según el medio, el acuerdo se ha valorado en cifras multimillonarias, con la PVF recaudando 40 millones de dólares (36,8 millones de euros) como parte de la transacción.
La financiación ha sido liderada por la familia DeVos, propietaria de los Orlando Magic de la NBA y de Grand Rapids Rise, una franquicia de PVF. Otros inversores incluyen al propietario de los Sacramento Kings, Vivek Ranadivé, y a la tres veces medallista de oro olímpica, Kerri Walsh Jennings, quienes participaron en el desarrollo inicial de la liga. El grupo propietario también incluye a los inversores de DC United, que se espera que reciban equipos de expansión.
Una ausencia notable de la nueva competencia será la de Vegas Thrill, que compitió en las dos primeras temporadas de la PVF, pero no participará en la próxima edición de la liga combinada debido a la ausencia de un grupo propietario local. Dallas, sin embargo, inicialmente programado para debutar en la PVF, se integrará a la nueva estructura de la MLV.
En un comunicado oficial emitido el martes por ambas ligas, la MLV describió la fusión como una “unificación y modernización del modelo de negocio”, con estándares de propiedad renovados, una estructura de gobernanza renovada y un enfoque innovador diseñado para mejorar tanto la experiencia de los atletas como la participación de los aficionados. La liga considera este cambio como la “evolución natural” de la PVF, cuya tercera temporada se rebautiza oficialmente como la campaña MLV 2026.
Según cifras de la revista estadounidense, el PVF generó más de 80 millones de impresiones en redes sociales, cerca de un millón de interacciones y más de 250.000 seguidores en tan solo sus dos primeros años. La asistencia superó las 750.000 personas en todos los partidos, con un promedio de 10.925 aficionados por partido para las Supernovas, que establecieron un récord de 13.486 espectadores en su primer partido contra el Atlanta Vibe.
Estas cifras reflejan el fervor por el voleibol en Omaha, subrayado por la multitud récord de 92,000 personas que abarrotó el estadio de fútbol americano de los Cornhuskers en 2023 para un partido de la Universidad de Nebraska. Durante su última temporada, la PVF contó con equipos como las Orlando Valkyries, que ganaron el campeonato, atrayendo a 430,000 espectadores en 116 partidos.
La recién formada MLV apunta a un mayor crecimiento, con el objetivo de contar con 10 equipos en 2026, expandirse a 12 en 2027 con nuevas franquicias en Washington DC y el norte de California, y llegar a 16 equipos para 2028. Cada franquicia operará bajo propiedad independiente, reflejando el modelo comercial utilizado por las principales ligas masculinas de todo el país.
SportsPro, otra publicación líder del sector, analizó las implicaciones de la fusión , señalando que el voleibol femenino profesional en EE. UU. ya estaba encaminado a un año de gran auge en 2026, cuando se esperaba la coexistencia de cuatro ligas. Con esta consolidación, el número se ha reducido a tres competiciones activas. El periodo de agencia libre se abre oficialmente este miércoles, y los equipos pueden comenzar a conformar sus plantillas para la próxima temporada. Ni la PVF ni la MLV han hecho más comentarios sobre el proceso de negociación, confirmó Sportico.
Esta noticia llega en medio de un auge generalizado del voleibol profesional femenino en Estados Unidos. En 2025, LOVB Pro se lanzó tras recaudar 100 millones de dólares (92 millones de euros), afianzando su presencia en el calendario competitivo. Mientras tanto, la Liga Profesional de Voleibol de Athletes Unlimited, activa desde 2021 y que se juega en otoño, sigue prosperando. Ambas ligas buscan aprovechar la creciente participación juvenil, una tendencia que, según USA Volleyball, ha visto un aumento del 40 % en las inscripciones de clubes femeninos desde la temporada 2013-14.
“El continuo crecimiento del deporte, con esta consolidación de equipos y liderazgo, eleva el entusiasmo a nuevas cotas”, declaró Jen Spicher, directora ejecutiva de PVF. “Nuestra confianza en el modelo de propiedad de equipos que hemos utilizado durante las últimas dos temporadas es más fuerte que nunca y elevará el deporte a un nuevo nivel en todo el país”.
