Presidente chino apoya la candidatura de Pekín 2022

Pekín. El presidente chino, Xi Jinping, recibió hoy al jeque kuwaití Ahmad al-Fahad al-Sabah, presidente de la Asociación de Comités Olímpicos Internacionales (ACNO) y miembro del Comité Olímpico Internacional (COI), ante quien defendió la candidatura de Pekín para los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022.

El mandatario comunista subrayó que si Pekín resultara elegida como sede, el evento “animaría a más de 300 millones de ciudadanos chinos a practicar deportes invernales”, algo que “contribuiría enormemente a la construcción del espíritu olímpico internacional”.

El jeque kuwaití, también presidente del Consejo Olímpico Asiático, deseó suerte a Pekín en su candidatura, que tiene una única competidora, la ciudad kazaja de Almaty, después de que Oslo se retirara a última hora de la liza.

Xi recordó el compromiso de China con el movimiento olímpico, mostrado en los Juegos Olímpicos de verano que la capital china acogió en 2008 y las Olimpiadas de la Juventud que el pasado año acogió la ciudad de Nankín.

Ambos acontecimientos, apoyó su interlocutor, “fueron un orgullo para China y para Asia”.

La sede de los JJOO de 2022 será anunciada en la asamblea que el COI celebrara el 31 de julio de este año en la ciudad malasia de Kuala Lumpur.

De resultar elegida, Pekín sería la primera ciudad de la historia en acoger unos Juegos Olímpicos de Invierno y otros de Verano, aunque en realidad esta ciudad sólo acogería las pruebas sobre hielo, ya que las de esquí se llevarían a las pistas de Chongli, situadas a 200 kilómetros de la capital china.

A favor de Pekín juega el amplio apoyo popular a unas nuevas Olimpiadas pequinesas (una encuesta publicada esta semana mostró que más del 90 por ciento de los chinos desean que se celebren en su país), aunque la candidatura cuenta con el inconveniente de que los JJOO de 2018 ya se celebrarán cerca de China, en la localidad surcoreana de Pyeongchang.

Además, el propio presidente del COI, el alemán Thomas Bach, destacó recientemente la buena calidad de las instalaciones kazajas en Almaty. EFE