NBA.COM.- El escolta CJ McCollum y el alero Carmelo Anthony fueron los principales jugadores en la recta final del primer partido decisivo entre los Pataneros de Portland y los Osos de Memphis.
Con la victoria, el equipo de Oregon aseguró la octava plaza para la clasificación de la Postemporada en esta peculiar temporada regular de la NBA.
Así, tras tanto batallar, Portland es de Playoffs, después de un sufrido 126-122 ante la Cenicienta de la 2019-2020, que termina yéndose de Orlando sin el premio de la postemporada, pero con la certeza de que en el futuro le espera grandes sonrisas.
A continuación, las observaciones del partido.
Jerarquía, capítulo 1: CJ McCollum está jugando con una marcha física menos por un problema en la espalda. Por momentos pareció desconectado, pero vaya si tomó el cierre por asalto.
Memphis estaba arriba por cinco puntos a cinco minutos del final, y CJ conectó una ráfaga de ocho puntos con su enorme talento para crearse el tiro desde el drible.
Aclarado, drible, dos triples, una conversión de media distancia y la ventaja para su equipo en el momento que más lo necesitaban. Terminó con 29 puntos en 44 minutos, con 11-19 campo (3-7 triples) y 4-4 libres. 14 de sus puntos fueron en el último cuarto. Indispensable.
Jerarquía, capítulo 2: Qué hermosa manera de cerrar el círculo de la historia de redención de Carmelo Anthony. De empezar la temporada afuera de la liga a ser importante para la clasificación a Playoffs de su equipo.
Terminó con 9 tantos en el último cuarto, pero nada más importante que un triple que define a la perfección la efectividad de su rol: esperó una descarga de Lillard en una esquina y conectó a distancia para la daga a 20,2 segundos del final. Terminó con 21 tantos (10-10 libres, 5-15 campo). Cuando fuerza disparos pierde su impacto. Pero cómo no esperar que meta un tiro como el del cierre quien es el segundo máximo anotador en activo de la historia.
El enorme desgaste en los seeding games parece haberle pasado algo de factura a Damian Lillard, quien entregó la posta en el clutch (algo que no venía pasando) y hasta estuvo errático: apenas 6-15 de campo, tomando casi todos sus disparos desde larga distancia (5-14). Encontró su lugar habitual en los libres y pudo cerrar con 31 puntos. Pero claro, si hace falta marcar su valor, vale ver la jugada para el triple de Melo. Fue el base quien penetró y juntó todas las marcas para dejar solo al alero. Fue su 10° asistencia del encuentro. Siempre presente.
Titánico partido de Jusuf Nurkic y con un valor emocional único, tras comunicar el fallecimiento de su abuela minutos antes del partido. El bosnio fue una verdadera bestia en la zona pintada, terminando con 22 puntos (8-14 campo, 2-3 triples, 4-9 libres), 21 rebotes (6 ofensivos), 6 asistencias, 2 robos y 2 tapones en 41 minutos. Brutal entrega para un jugador fundamental para Portland.
Memphis no mostró su mejor imagen en los seeding games, pero la cambió por completo en este Play-in. La moneda no cayó de su lado, pero el futuro le sonríe. Valanciunas (22 puntos y 17 rebotes), Brooks y Clarke (20 cada uno) hicieron lo suyo, pero la demostración de Ja Morant, por contexto, marca lo especial que es y será. Líder absoluto de unos Grizzlies que tuvieron chances porque su base montó un show ofensivo que terminó en la máxima anotación de su corta carrera: 35 puntos (13-28 campo, 3-6 triples, 6-8 libres), 4 rebotes y 8 asistencias en 42 minutos.
Su segundo tiempo fue fantástico, dañando por completo con su estilo vertical. Sí, se equivocó en el cierre (3 de sus 8 pérdidas en el último cuarto), pero es algo lógico para alguien que afrontaba una situación así en su primera campaña. El candidatazo al Rookie del Año cerró su primer curso NBA a lo grande.