La atleta Sunisa Lee, sucesora de Simone Biles como campeona olímpica en la modalidad de ejercicio completo de gimnasia artística, fue víctima de una agresión racista en la ciudad de Los Ángeles, como se desprende del estremecedor testimonio que ella misma ha ofrecido esta semana a la cadena estadounidense CNN.
La gimnasta se encontraba el pasado mes de octubre en el centro de la ciudad con un grupo de amigas, junto a quienes esperaba la llegada de un taxi que las llevaría a casa tras una noche de fiesta. De repente, un vehículo se paró cerca de ellas y sus tripulantes empezaron a proferir todo tipo de insultos y burlas que hacían referencia directa a su condición de mujeres de origen asiático, exigiéndoles además que volvieran a sus “países”.
Por si eso no fuera suficiente, Suni Lee ha asegurado que uno de los asaltantes no dudó en atacarla con un spray de pimienta. Afortunadamente, la sustancia no llegó a herir sus ojos y solo rozó uno de sus brazos. En cualquier caso, la afamada deportista, de tan solo 19 años y nacida en Saint Paul (Minnesota), no ha podido contenerse a la hora de expresar la mezcla de indignación y rabia que la invade a raíz de semejante vileza.
“Me enfadé muchísimo, pero no hubo nada que pudiéramos hacer porque se marcharon a toda velocidad. Tampoco quise hacer nada contra ellos, porque tengo una reputación y no quería meterme en problemas. Ha sido muy duro, porque simplemente dejé que pasara”, ha señalado Suni en su charla con el canal, en el que también ha explicado que se encontraba en la ciudad californiana debido a su participación en el popular concurso televisivo ‘Dancing with the Stars’.
