BUENOS AIRES. Si los pronósticos siguen infalibles, Thomas Bach sería elegido el martes nuevo presidente del Comité Olímpico Internacional (COI) en reemplazo del Jacques Rogge, tras 12 años de mandato que dejaron a ese organismo en relativa calma.
El alemán Bach parte como favorito para esta votación del 125 congreso de la familia olímpica, que en otras dos cruciales decisiones y sin lugar para la sorpresa le otorgó a Tokio la sede de los Juegos de 2022 y le devolvió a la lucha su status de deporte olímpico.
Tres días después de elegir a Tokio por sobre Madrid y Estambul, el COI cerrará su congreso en la capital argentina con una votación para elegir al sucesor del belga Rogge, que deja el organismo en un estado mucho más sólido pero ante serios desafíos que incluyen los retrasos en la construcción de sedes para Río 2016.
De entre seis candidatos, se estima que la puja real estará entre Bach, el puertorriqueño Richard Carrión, director de la comisión de finanzas, y el vicepresidente del COI Ng Ser Miang, de Singapur.
Los otros candidatos son los miembros de la junta ejecutiva Sergei Bubka, de Ucrania, y C.K. Wu de Taiwán, y un ex miembro, Denis Oswald, de Suiza, para esa elección en la que el sucesor de Rogge conducirá la organización hasta los Juegos del 2020, con un potencial segundo período de cuatro años.
Rogge, de 71 añoS, deja el cargo tras dirigir al COI durante un periodo de relativa estabilidad que abarcó tres Juegos Olímpicos de verano y otros tantos de invierno. Cirujano ortopedista y que compitió en tres olimpiadas en vela, el belga concluye su periodo con la reputación de haber manejado con calma y firmeza las políticas del usualmente turbulento mundo del deporte olímpico.
El belga, elegido en Moscú en 2001, en lugar del español Juan Antonio Samaranch, asumió tras el escándalo de Salt Lake City, en el que 10 integrantes del COI renunciaron o fueron expulsados del Comité por haber recibido becas académicas, pagos y regalos durante la pelea por la sede de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2002.
“Espero que la gente, con el tiempo, llegue a considerar que hice un buen trabajo para el COI”, dijo Rogge en una reciente entrevista con The Associated Press. “Eso es por lo que uno quiere ser recordado”, agregó el dirigente, quien bajo su mandato adoptó una línea dura contra el dopaje y las violaciones de carácter ético.
Su reemplazante, además de lidiar con los Juegos de Río, enfrenta otros temas delicados como la respuesta negativa por la legislación antigay en Rusia antes de los Juegos Olímpicos de Invierno en febrero próximo en Sochi.
Otro de los desafíos del sucesor de Rogge son la lucha contra el dopaje y las apuestas ilegales; la revisión del programa deportivo olímpico, la posibilidad de que los Juegos tengan por primera vez a Africa como sede y la consolidación de los Juegos de la Juventud, que en 2018 se realizarán en Buenos Aires.
Bach, de 59 años, medalla de oro en esgrima (florete) en Montreal 1976, tiene vasta experiencia dentro del COI, del que es su vicepresidente desde 2006, año en el que también asumió como titular de la Confederación Deportiva Olímpica Alemana.
Carrión, un banquero de 60 años, mandamás de las finanzas del COI desde 2002, carece de antecedentes olímpicos pero hizo buena carrera dentro del organismo gracias a su visión para los negocios. Entre otras cosas, firmó un acuerdo récord por 4.380 millones de dólares con la NBC para los derechos televisivos estadounidenses hasta el 2020 y ha supervisado el crecimiento de las reservas del COI de 100 millones a 900 millones de dólares.
Y Ng, empresario y diplomático de 64 años y sin méritos deportivos, es vicepresidente desde 2009 y contaría con respaldo unánime del bloque de Asia, un continente de influencia creciente.
El más laureado a nivel deportivo de los postulantes es el legendario Bubka, el más joven de todos con 49 años, cuatro veces participante olímpico en salto con garrocha y ganador de oro en los Juegos de Seúl 1988. Además fue seis veces campeón mundial y todavía poseedor de marca mundial.
Wu, arquitecto de 66 años y sin experiencia olímpica y Oswald, de 67, abogado y tres veces campeón olímpico en remo, completan el sexteto de candidatos.
En las elecciones secretas y electrónicas entre unos 100 miembros del COI de los cinco continentes, se elimina a un candidato en cada votación, el que obtenga menos apoyo, mientras uno de ellos no consiga más del 50% de los sufragios para convertirse en el sucesor de Rogge.