Madrid. (EFE). El Barcelona aprovechó la derrota del Real Madrid en Villarreal para, con un ajustado pero importantísimo triunfo en el Cívitas Metropolitano ante el Atlético de Madrid (0-1), volver a situarse como líder en solitario de LaLiga Santander, ahora con tres puntos de ventaja.
El conjunto de Xavi Hernández, que había sucumbido en sus dos anteriores visitas al coliseo rojiblanco, sacó esta vez tajada a un gol del francés Ousmane Dembele y a la falta de mordiente de los hombres del argentino Diego Pablo Simeone y a una salvada bajo palos en la prolongación del uruguayo Ronald Araújo para evitar el tanto de Antoine Griezmann.
No hizo un partido brillante el Barcelona, que no pudo contar por sanción con el polaco Robert Lewandowski, su referente en punta, pero sí que se mostró serio y tuvo las dosis de calidad suficiente para manejar la situación guiado por Pedri González, de nuevo determinante. Fue el que gestó el gol que desequilibró el choque con una internada entre varios rivales para servir a Gavi y este a Dembele, que cruzó un balón raso al que no pudo responder el esloveno Jan Oblak.
El Atlético de Madrid, que apostó de salida por el joven mediocampista canterano Pablo Barrios y por Antoine Griezmann y Joao Felix en punta, tuvo alguna que otra opción para anular la ventaja del Barcelona, pero careció de acierto en la zona decisiva ante el meta alemán Marc Andre Ter Stegen y cuando in extremis Griezmann le había superado apareció Araújo para evitar las tablas.
El triunfo, cerrado con las expulsiones finales del montenegrino Stefan Savic y Ferran Torres tras protagonizar una acción prácticamente de lucha libre, alienta al Barcelona ante la disputa esta semana próxima de la Supercopa de España en Riad y supone un nuevo frenazo al objetivo del Atlético de Madrid, que vuelve a salir de la zona de la Liga de Campeones, al caer al quinto puesto, a cinco puntos ya de la Real Sociedad, a uno del Betis y empatado con el Villarreal. Incluso le podría superar este lunes el Athletic si gana a Osasuna en el último encuentro de la decimosexta jornada.
La Real Sociedad confirmó que se encuentra en pleno estado de gracia. Ganó por primera vez en Almería tras una actuación convincente, sin apenas dar opción a su rival y confirmó la tercera plaza en la clasificación y por tanto su candidatura a la ‘Champions’.
David Silva celebró su trigésimo séptimo cumpleaños con el gol que abrió el marcador al inicio del segundo tiempo (m.47) y el noruego Alexander Sorloth confirmó poco después (m.52) su buena racha con un latigazo que zanjó el triunfo del equipo de Imanol Alguacil por 2-0.
También el Betis del chileno Manuel Pellegrini ratificó sus aspiraciones europeas con un triunfo en el siempre difícil campo de Vallecas ante el Rayo (1-2), al que cortó la racha de siete partidos ligueros sin perder.
Abrió la cuenta gracias a una carambola que acabó en autogol de Iván Balliu (m.7) y se sobrepuso al empate de Sergio Camello (m.20) gracias a una brillante acción y un gran disparo del brasileño Luiz Henrique (m.40).
Luego supo, con sobriedad y consistencia, anular las intentonas de los jugadores de Andoni Iraola e incluso tuvo ocasiones para ampliar la ventaja, pero la madera se lo impidió en remates de Sergio Canales y Rodri Sánchez. Por tanto, se marcha pleno de moral a Arabia Saudí para enfrentarse el jueves al Barcelona en la segunda semifinal de la Supercopa.
El Sevilla logró la primera victoria de la temporada en el Ramón Sánchez Pizjuán al imponerse al Getafe por 2-1. Triunfo imprescindible ante la delicada situación del cuadro del argentino Jorge Sampaoli que sale de la zona de descenso.
Hicieron el saque de honor los tres campeones mundiales del equipo hispalense, Gonzalo Montiel, ‘Papu’ Gómez y Marcos Acuña. Este último respondió al homenaje recibido con el primer gol de su equipo (m.36), al rematar de cabeza un lanzamiento de falta lateral del croata Ivan Rakitic.
El equipo madrileño, al que se le anuló un tanto conseguido por el turco Enes Unal antes del descanso, no lo puso fácil ni cuando Rafa Mir consiguió el segundo tanto (m.80), porque Borja Mayoral, que había tenido varias opciones para igualar, acortó distancias tras una internada hasta la línea de fondo de Cristian Portu (m.87).
Sufrió los últimos compases la afición sevillista, que solo pudo respirar cuando el colegiado pitó el final y cerró un 2-1 que Sampaoli y sus hombres pretenden que sea el inicio de la reacción. De momento, el Sevilla pone fin a una racha de seis partidos sin vencer y sale de la zona roja, aunque empatado a puntos con el Cádiz y tan solo uno más que el Espanyol, que cae a la penúltima plaza. José Antonio Pascual.