ALBAT.- En un juego digno de un duelo en el que se juega un lugar en la postemporada, los Cerveceros de Milwaukee anularon la localía del Wrigley Field para robarles el título divisional a los Cachorros de Chicago en su propia casa al vencerlos por marcador de 3-1.
En el juego 163 de la temporada, los Cerveceros lograron enviar a los Cachorros al juego divisional en donde se enfrentaran al perdedor del partido de desempate entre los Dodgers de Los Ángeles y los Rockies de Colorado.
Josh Hader obtuvo el salvamento del partido al sacar los últimos seis outs del encuentro, luego de un rally de dos carreras de los Cerveceros en la octava entrada, que definió el encuentro que en ese momento estaba empatado a una vuelta por bando.
La primera carrera del partido entró en la tercera entrada, producto de un sencillo remolcador de Yelich que puso delante a los Cerveceros 1-0. Los Cachorros ripostaron en la quinta, con un cuadrangular solitario de Anthony Rizzo.
Ya en el octavo capítulo, con dos corredores en los senderos Lorenzo Cain disparó un sencillo remolcador de la segunda de los Cerveceros, quienes ampliaron la ventaja con imparable impulsador de Ryan Braun, dándole la ventaja definitoria a los de Milwaukee.
Por su parte, el máximo candidato al premio al Jugador Más Valioso, Christian Yelich, no logró conseguir la Triple Corona, al finalizar líder en promedio de bateo con .326, pero en segundo lugar en remolcadas (110) y jonrones (36)
Con éste título divisional, los de Milwaukee lograron el segundo banderín de su historia desde que se movieron a la División Central de la Liga Nacional en 1998, cuando se mudaron desde la Americana. El primer cetro divisional de los Cerveceros llegó en 2011 y ahora esperarán al ganador del Juego de Comodín.
Con ésta derrota, los Cachorros rompieron una racha de 2 títulos divisionales consecutivos, ganándolos en 2016 y 2017.
