MIAMI – El primer pitcheo que hizo el dominicano José Ureña el Día Inaugural del 2018 terminó del otro lado de la cerca del jardín derecho del Marlins Park, rechazado con fuerza por Ian Happ, de los Cachorros de Chicago.
Un año después, el primer envío de Ureña en el Opening Day fue un rectazo de strike que retumbó en la mascota del cátcher Jorge Alfaro.
“Yo no pensé en lo que pasó el año pasado. Simplemente siempre trato de establecer mi pitcheo y abrir por la zona de strike y ya es cuestión del bateador si le hace swing o no. Va y le daba y la botaba de jonrón también, pero no vine pensando en eso”, explicó el dominicano, que se convierte en el primer lanzador de los Marlins de Miami que abre dos partidos inaugurales de temporada desde que lo hiciera Josh Johnson en el 2008 y 2009.
Ureña planteó un duelo con el zurdo Kyle Freeland, abridor de los Rockies de Colorado, hasta que en el cuarto episodio, los visitantes rompieron la pizarra con un racimo de cuatro carreras en el que influyeron dos errores de la defensa de Miami.
Pero más que los errores, lo que más afectó la labor del quisqueyano fue un poderoso lineazo que recibió en una pierna, salido del bate de David Dahl en el segundo episodio.
“Sí, claro que me afectó. A partir de ahí nada fue igual, pues tenía que batallar con el dolor a la hora de caer. Ya no podía caer de la misma manera y eso siempre termina afectándote”, explicó a la prensa tras el partido en que su equipo cargó con la derrota 6-3.
Ureña vio rota con este revés una cadena de seis victorias consecutivas que venía de la pasada temporada, cuando tuvo un mes de septiembre impecable.
A sus aún jóvenes 27 años le toca ser el líder de una rotación con poca experiencia y mucho talento.
“Yo converso con los muchachos, no es que yo tenga mucha experiencia, pero tengo un poco más y les doy mi opinión sobre cómo enfrentr determinada situación, en que momento hacer tal o más cual pitcheo. Y siempre estoy abierto a dar consejos y a aprender también”, concluyó Ureña, quien en sus primeras cuatro campañas en las Mayores tiene balance de 28-33 y efectividad de 4.45, pero 23-19 y 3.87 desde que se convirtió en abridor en el 2017.
