Samara, Rusia
AP
Sin aficionados que los alentaran a su llegada, como sí ocurrió en el pasado, México arribó el sábado por la tarde a su hotel en esta ciudad, sede de su partido de octavos de final de la Copa del Mundo ante Brasil.
El Tri fue recibido por decenas de seguidores cuando llegó a su concentración en la sede del Dinamo en Moscú, a Rostov Del Don para su partido ante Corea del Sur y a Ekaterimburgo para chocar con Suecia.
La delegación mexicana arribó al hotel Renaissance, encabezada por el presidente de la Federación Mexicana, Decio de María, y por su secretario general Guillermo Cantú, además del entrenador Juan Carlos Osorio.
Ningún dirigente o jugador estuvo disponible para dar declaraciones.
México, que nunca ha llegado a los cuartos de final en un Mundial jugado en patio ajeno, reconocerá la Cosmos Arena el domingo por la noche en su cierre de preparación para enfrentar a Brasil.