SANTO DOMINGO. Tras obtener su clasificación para los Juegos Olímpicos de Londres, la gimnasta dominicana Yamilet Peña tiene un sueño que lo ha transformado en su meta inmediata: conquistar una medalla olímpica.
Yamilet, que cumplió 17 años en diciembre pasado, ha dejado a un lado sus estudios, a su familia y ha sacrificado hasta sus amigos y allegados para ir en pos de esa meta que tiene como punto culminante los Juegos Olímpicos de Londres.
Sin importar los riesgos que tenga que correr, está determinada a alcanzar su sueño. Yamilet tiene como soporte su prodigioso privilegio de realizar el triple salto en el caballo, un movimiento en la gimnasia que, en la actualidad, en el mundo solamente ella puede realizar.
“El triple salto tiene bastante riesgo, pero la posibilidad de realizar un sueño es lo que hace la vida interesante”, dice Yamilet, para luego reiterar que “esa es mi meta”.
La fantasía de Yamilet está sustentada en su convicción de que el deporte “es vida y lleva a muchas cosas buenas”, como es la de alcanzar el podio en unos Juegos Olímpicos.
Pero más aún, consciente de los riesgos, ella apunta que “más riesgos tenemos (los jóvenes dominicanos) en las calles”.
La gimnasta dominicana es la única dama que realiza ese salto en el mundo, que sólo es materializado en la rama masculina.
Añade que esa determinación, pese al peligro, “es lo que me pudo llevar a los (Juegos) Olímpicos”. “El realizar ese salto fue lo que me dio la oportunidad” de entrar en la cita deportiva de más trascendencia, además de convertirse en la primera atleta del deporte de la gimnasia que logra un nicho para ir a unas olimpiadas.
“Así que, no importa el riesgo si voy en pos de tratar de hacer una proeza, primero para mi país, y después para complacer una aspiración personal; y del deporte nacional”.
El entrenamiento
Yamilet trabaja siete horas diarias en dos sesiones para mantenerse en condiciones de asistir a competencias locales e internacionales.
En los últimos años ha estado sometida a un riguroso entrenamiento, debido a que ha tenido por delante compromisos en campeonatos mundiales, Juegos Panamericanos y Centroamericanos.
“He tenido que trabajar duro para alcanzar la clasificación (a los Juegos Olímpicos de Londres), pero ya he concretizado la primera parte de mi sueño, que es asegurar mi participación”, en los Juegos de Londres. El tránsito que ha debido sortear Yamilet no ha sido fácil.
Con ella de la mano ha estado su entrenador de prácticamente toda su vida: Frank Susana, quien cuenta de las vicisitudes que han debido pasar para llegar hasta la clasificación. “Ha sido un proceso arduo de trabajo continuo, con muchos sacrificios, mucho entrenamiento y muchas estrategias”, afirma el entrenador.
Antes de llegar a Londres, Yamilet tendrá que superar un obstáculo que la ha tocado en por lo menos tres ocasiones que ha estado a punto de casarse con la gloria ganando una medalla mundial, también estuvo cerca de obtener una presea en los recién finalizados Juegos Panamericanos, y lo mismo ocurrió en los Juegos de Mayagu¨ez.
“Debemos trabajar duro en el aspecto psicológico, porque en tres ocasiones se nos ha quedado frisada. No ejecuta por el entorno que le ha tocado ver en situaciones apremiantes”, cuenta Susana.
La más reciente experiencia fue en Guadalajara, en ocasión de los Juegos Panamericanos.
Logró entrar a las finales, y cuando se disponía a realizar su actuación, con un escenario lleno a toda capacidad y muchas cámaras. Yamilet se quedó frisada. Susana dice que ella “se bloqueó” y no pudo acceder a una medalla.
Para superar esa situación la Federación Dominicana de Gimnasia trabaja en la parte psicológica de la atleta, tratando de recrearle el panorama durante los entrenamientos, con médicos especialistas en la materia.
Yamilet es una especialista, además en triple salto del caballo, también en piso a manos libres, biga de equilibrio y barras asimétricas.