Gerard Piquè se ha unido a la lista de futbolistas que han besado la lona en su combate con Hacienda. El futbolista ha perdido en la Audiencia Nacional el contencioso que empezó contra las resoluciones de la Agencia Tributaria, que le acusaba de simular la cesión de sus derechos de imagen a una de sus sociedades, por lo que tenía que pagar 1,5 millones de euros. La sentencia también da la razón al fisco en uno de los puntos que levantaron al mundo del fútbol: si la tributación del pago a los agentes correspondía a los clubes o a los deportistas. La sentencia, del pasado 13 de mayo, es recurrible ante el Supremo.

La historia viene de lejos. El 5 de junio de 2013, Hacienda sancionó a Piqué por los impuestos de la renda de 2008, 2009 y 2010. Consideraba que había eludido el pago de casi 1,5 millones y le impuso una sanción de 678.012 euros. En aquella época, con Cristóbal Montoro al frente del ministerio, la Agencia Tributaria abrió inspecciones a los futbolistas de los grandes clubes. Buscaba casos en los que hubiesen simulado la cesión de sus derechos de imagen, lo que cobran por anuncios, por ejemplo, a sus propias empresas para pagar menos impuestos. También examinó quién pagaba a los agentes, si el club o los deportistas, porque consideraba que era un servicio de los futbolistas pero que para escamotear dinero al fisco lo asumían los equipos. También hubo actas contra los clubes.

La sentencia da la razón a la Agencia Tributaria en los derechos de imagen y en el pago a los agentes

La mayoría de grandes futbolistas españoles fueron sancionados y pagaron. Hacienda consideraba que la venta de los derechos de imagen a una sociedad de su propiedad para pagar menos impuestos era una simulación. Los extranjeros que habían usado sociedades en paraísos fiscales (Messi, Ronaldo, Falcao, Di María, Marcelo, Modric, Alexis, Mascherano, Carvalho, Coentrao…) fueron denunciados en vía penal y la inmensa mayoría llegaron a acuerdos. Solo Xabi Alonso ha decidido ir a juicio convencido de su inocencia. El caso de Xabi es peculiar, porque la sociedad está en Madeira, dentro de la UE, pero la Fiscalía no da su brazo a torcer y aunque inicialmente no vio delito después le ha presentado una segunda querella.

Los futbolistas españoles fueron sancionados, pero sin llegar a la vía penal, porque sus sociedades estaban en España y no se les podía acusar de ocultación, un elemento clave para el delito fiscal. Cuando Hacienda ha acusado de delito fiscal a grandes abogados que tenían sus sociedades declaradas, ha perdido.

Piqué fue uno de los que recibieron la inspección pero no se conformaron. En diciembre de 2016, el tribunal administrativo de Hacienda confirmó en parte la sanción: mantuvo que debía pagar los 1,5 millones pero retiró los 678.000 euros de sanción. El 9 de febrero de 2017, Piqué planteó un recurso a la Justicia. Las fechas son significativas. Solo un mes después, Piqué aprovechó un partido de la selección española para cargar contra la Abogacía del Estado por perseguir a los futbolistas del Barcelona. “Yo con los jugadores del Madrid no tengo ningún problema. Lo que no me gusta es ver en el palco del Bernabéu a las personas que mueven los hilos en este país. Curiosamente, la persona que imputò a Messi y Neymar estaba al lado de Florentino. Solo hay que ver ese palco y cómo tratan a Neymar y a Cristiano”. Le contestó el entonces abogado del Estado jefe de lo Penal, Edmundo Bal, en este diario.

Durante dos años, la Justicia ha analizado el caso, en el que había en juego 1,5 millones de euros. Hacienda consideraba que la cesión de derechos de imagen de Piqué a su empresa, Kerad Project 2006, “fue simulada”. Hacienda se basaba en que la cesión, de 2006, cuando Piqué empezaba su carrera y debutó en la liga inglesa, se hizo por 3.000 euros y hasta 2025, un precio “totalmente irrisorio y fuera de toda lógica comercial o económica”. Además, ni siquiera hay constancia de que ese abono se produjera.

Piqué acusó a la Abogacía del Estado: “La persona que imputó a Messi y Neymar estaba al lado de Florentino. Solo hay que ver ese palco”

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que ya trató el caso hace un año en un recurso de la empresa, consideró que era una empresa ficticia por “la vinculación existente entre Gerard Piqué y Kerad Project y la carencia de medios materiales y humanos de esta para llevar a cabo la gestión de los derechos de imagen”, ya que “no tiene ningún trabajador contratado ni dispone de local para el desarrollo de la actividad distinto del domicilio del deportista, tampoco de otros medios materiales, habiéndose dedicado solo a la adquisición de dos inmuebles”.

Kerad Project, una de las empresas del futbolista, pagaba a su agente y cobraba de anuncios. Las firmas pagan un 25% de impuesto de sociedades, casi la mitad que si lo hubiera tributado Piqué en impuesto de la renta. El uso de sociedades para reducir la factura fiscal ha hecho perder a presentadores de televisión, actores, abogados, mèdicos… Los presentadores de televisión que han escapado a estos procedimientos han logrado demostrar que la empresa sí tenía actividad. Es el caso de Marìa Teresa Campos​.

Hacienda considera que la cesión de derechos fue “simulada”, por “un precio “totalmente irrisorio y fuera de toda lógica comercial o económica”

Además del tema de los derechos de imagen, la inspección incluía otro de los frentes de Hacienda contra el fútbol, el pago a los agentes. El representante de Piqué cobraba del FC Barcelona, pero para Hacienda debía ser Piqué el que le pagara tras cobrar del Barça. Al saltarse ese paso, se ahorraban impuestos. La Audiencia concluye que el “demandante debe computar como rendimiento del trabajo las cantidades satisfechas por el FCB a IMG”, la agencia de su representante. Las inspecciones por los pagos a los agentes levantaron en armas al fútbol español. La sentencia da detalles de los cobros de Piqué, como los 70.000 euros que le pagó la Federación Española de Fútbol por acudir a la Copa de Confederaciones de Sudáfrica en 2009, en la que España cayó eliminada a la primera de cambio. Un año después, ganó el Mundial allí mismo.

La defensa de Piqué defendió la validez del contrato entre el futbolista y su empresa, pero la Audiencia no lo acepta. En una sentencia del 13 de mayo da la razón a Hacienda. El deportista ha pedido una rectificación de errores. La sentencia es recurrible ante el Supremo. La pareja de Gerard Piqué, la cantante colombiana Shakira, tiene problemas mucho mayores con Hacienda. La Fiscalìa la acusa de delito fiscal por no tributar en España durante años pese a pasar en Barcelona más de medio año. La cantante ha defendido que “ha cumplido en todo momento, incluyendo en el periodo comprendido entre 2011 y 2014, con sus obligaciones tributarias en todos aquellos países en los que ha trabajado (incluyendo EEUU) y no debe ninguna cantidad a la Hacienda española”. El agente de Gerard Piqué no contestó a las preguntas de este diario.