Las medidas para evitar las infecciones cruzadas entre los deportistas y el mundo exterior se han ampliado a la basura, que se quedará dentro de la burbuja que separa a los dos escenarios, dijeron el jueves los organizadores de los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022.
Se movilizará un equipo de trabajadores especiales para recolectar y trasladar los residuos dentro de la burbuja para evitar una filtración del coronavirus desde el exterior, explicaron las autoridades. Los Juegos comienzan el 4 de febrero.
Ma Boyang, responsable de planificación y operaciones en la Villa Olímpica, dijo que los desperdicios se guardarán en almacenamientos temporales, y más tarde se trasladarán para su procesamiento central.
China ha insistido en la posibilidad de que el virus se transmita a través de objetos inanimados, especialmente en alimentos congelados.
La mayoría de los expertos han descartado la posibilidad de contagios por esas vías, señalando que los envases tienen trazas mínimas del virus, muy probablemente depositadas allí por los trabajadores.
Con la propagación de la variante ómicron, la preocupación se ha vuelto a centrar en evitar contagios entre los deportistas, que podrían derivar en cuarentenas de hasta cinco semanas.
Las autoridades de salud siguen monitoreando la situación pero creen que “las medidas preventivas pertinentes del manual para la prevención de la pandemia han sido sometidas a una rigurosa evaluación científica y son efectivas para garantizar la seguridad y evitar la propagación de la epidemia”, señaló Yan Jiarong, vocero del comité organizador.
En el caso de que se registre un positivo dentro de la burbuja, las autoridades seguirán el mismo protocolo que si fuese detectado fuera, añadió.
“Creemos que estas medidas pueden reducir de forma eficaz el riesgo de la pandemia y pueden no solo garantizar la participación segura y conveniente de los deportistas y todo el personal olímpico en entrenamientos, competencias y trabajo, sino también proteger la salud y la seguridad del pueblo chino”, manifestó el portavoz.
China ha tomado medidas drásticas, como confinamientos frecuentes y pruebas de detección del virus masivas, contra los brotes locales, aunque no ha conseguido erradicar los casos por completo.
La Comisión Nacional de Salud anunció el jueves 69 nuevos casos de transmisión local, en su mayoría en la provincia oriental de Zhejiang, muy lejos de las sedes olímpicas. China ha detectado al menos dos casos de la nueva variante ómicron.
La propagación de la última mutación del coronavirus es el último desafío para los Juegos, marcados por problemas técnicos y políticos que van desde la escasez de vuelos para los deportistas y sus equipos, a un boicot diplomático encabezado por Estados Unidos en protesta por los abusos de los derechos humanos en China.