Después de un largo proceso, la escalada deportiva fue aceptada como deporte panamericano por la asamblea de Panam Sports en diciembre de 2020 y debutará en Santiago 2023, siendo clasificatoria para los Olímpicos de París, a disputarse en dos años más.
La introducción de esta disciplina dio un nuevo impulso a sus cultores, entre ellos los pertenecientes a la Fundación Deporte Libre. Este agrupación codiseña espacios para juegos y actividades físicas con el fin de construir comunidades seguras, inclusivas y saludables.
“En la fundación un gran número de personas somos escaladores, todos deportistas, lo hacemos hace años y el primer gran proyecto fue el Parque de Escalada Los Silos en el Parque Los Reyes, entonces, hay un componente emocional muy potente con el deporte y estamos convencidos que se tiene que potenciar en la gente”, sostiene Pedro Anguita, fundador y encargado de arquitectura de la agrupación.
La última iniciativa en que participó Deporte Libre fue en las denominadas “Plazas de la Ñiñez”, en las poblaciones El Roble y Santo Tomás de la comuna de La Pintana, que junto con entregar espacios adaptados a niños entre cero y cinco años, también cuenta con muros para practicar la escalada deportiva.
“Es clave que la escalada se empiece a posicionar, a valorar y en el fondo empiece a agarrar vuelo y que existan muchos más escaladores, es muy importante que las competencias como Santiago 2023 lo integren para que se masifique y se valide como deporte”, agrega Anguita.
“El espacio público es el primer paso para que el deporte crezca en el país, estar presentes donde todos ven es fundamental”, cerró el arquitecto.
La escalada deportiva, enmarcada en los deportes urbanos y olímpica desde Tokio 2020, debutará en Chile en unos Juegos Panamericanos, disputándose en pruebas de velocidad, bloques y dificultad. Entre los exponentes destacados del país se encuentran Facundo Langbehn, Benjamín Ayala, Tomás Ravanal, Alejandra Contreras, entre otros. Conoce más de este deporte pinchando acá.
