El ejemplar Felo Flores (hijo de Bobalicón y Fumadita) era un caballo de fondeo que, y a pesar de su tamaño, hizo historia con la monta de Elido Núñez (El Abuelito). Este equino surgió finalizada la guerra de abril del 1965 y dio origen a un inusitado entusiasmo por las carreras de caballos.
Este potro estableció récord de triunfos y fue definido como un verdadero campeón que le dio vida al entonces hipódromo Perla Antillana y al hipismo por todo el país. El propietario del potro Felo Flores tenía por nombre Papito Estévez, quien presagiaba constantemente lo que haría Felo Flores en las carreras, ejemplar que posee el récord de 2:3 segundos en un clásico de 2,000 metros en los años 70, dejando detrás el que había impuesto otro gran potro que respondía al nombre de Pedrito, que era de 2:3 1/5.
De seguro que la historia hípica dominicana ha tenido muchos ejemplares que son gratamente recordados por sus grandes hazañas en la pista. Por eso es preciso mencionar a dos legendarios equinos: Felo Flores y Sicótico.
